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Todos ponen manos a la obra

Haití – Ya se han plantado miles de árboles, y otros más están germinando o están listos para ser plantados por muchas manos: desde escolares hasta agricultores haitianos en una de las regiones más secas del país.

En Haití, Join For Water sigue trabajando en las cuencas de tres ríos: el Denisse, el Catinette y el Moustiques, situados en una región muy seca del noroeste de Haití. La naturaleza de esta región ha sido gravemente dañada y necesita un impulso para salir de una espiral descendente. La población crece, y también la necesidad de alimentos suficientes: se abaten más árboles para crear campos. Pero una agricultura demasiado intensiva en un clima seco hace que el suelo apenas contenga nutrientes. En las temporadas húmedas, llueve mucho, pero el agua apenas puede penetrar en el suelo duro y seco.

En esta zona, Join For Water y sus socios se esfuerzan por restaurar y proteger los ecosistemas. La reforestación es un elemento importante y los comités de gestión deben velar por la conservación de las zonas reforestadas. También se presta mucha atención a la educación ambiental, para las comunidades, los comités de gestión, las escuelas y los gobiernos.

2 personas que tienen literalmente los pies en el campo hablan de sus esfuerzos diarios.

 

Marc Jean Mathieu, animador «medio ambiente» en 3 escuelas

Haïti landbouw boomkwekerij

» Soy animador sobre el tema del «medio ambiente» en 3 escuelas de Passe Catabois. Lo hago en nombre del Comité de Cuenca del Río Moustiques. Tengo otros 3 compañeros y juntos trabajamos en 12 escuelas.

Durante las vacaciones, planté semillas en bolsas llenas de tierra con los alumnos. Vivo a 5 minutos de la escuela y fui a regarlas todos los días, porque es un trabajo delicado. Así es como he ampliado el vivero de árboles aquí.

Plantamos muchos árboles frutales: mango, cereza, tamarindo, guanábana… Junto con el comité de cuenca, estudiamos qué árboles elegir. Empezamos con 1.000 árboles, 900 de los cuales están creciendo bien. En una próxima fase plantaremos otros 1500 árboles.

Los alumnos se llevan árboles para plantarlos en casa, pero también recibimos el apoyo de algunas personas de nuestro pueblo que poseen una parcela. Entonces se nos permitirá forestar esas parcelas; ya podemos empezar con una parcela de 100 y otra de 40 árboles. Eso está bien, así los niños también pueden ver la evolución de estos terrenos.

El proyecto GIRESECALM prevé la plantación de 150.000 plántulas, para lo cual 138 personas trabajan en los viveros, entre ellas 86 mujeres.

Estoy contento con este trabajo, soy agrónomo de formación y puedo poner en práctica mis conocimientos. Me siento útil y me gusta trabajar con niños; también soy profesor.

El enfoque de la gestión integrada del agua me parece bien. Porque con nuestras intervenciones, la calidad del agua mejorará y también nuestra salud. Y así protegemos no sólo el medio ambiente, sino también nuestras vidas».

 

Clodius Desinor, agricultor y presidente del comité de gestión del lago Erné

Haïti landbouw

«Aquí notamos un verdadero cambio en las temporadas. Este año estamos viviendo una sequía muy larga. Estamos esperando impacientemente la lluvia. La erosión también es un gran problema aquí: cuando llueve, llueve mucho. La tierra es arrastrada, junto con los nutrientes importantes para el cultivo de hortalizas. Esto hace imposible la práctica de la agricultura en estas parcelas.

Join For Water y su socio ODRINO nos han mostrado cómo evitar que el suelo sea arrastrado. Esto puede hacerse con intervenciones sencillas. Las piedras y las plantas adecuadas garantizan que la tierra no sea arrastrada. Muchos habitantes participaron en el trabajo comunitario, lo que crea una bonita dinámica. Trabajamos con Nicolas, el agrónomo de ODRINO. Controla el rendimiento de nuestras parcelas y, de este modo, también somos un sitio piloto y de demostración. Junto con nuestra comunidad, seguiremos manteniendo las parcelas.

Hoy ya puedo empezar mis actividades agrícolas, porque la tierra en la que cultivo no será arrasada. Ya he empezado a plantar guisantes y pronto quiero cultivar también tomates. Con los ingresos de la cosecha, podemos pagar la escuela o comprar medicamentos para nuestros hijos.»

 

Fotografías: Céline Jacmain